miércoles, 18 de diciembre de 2013

MUCHOS CUENTOS

A pesar de que el 2013 fue (muy) complicado en lo personal, en lo literario me brindó muchas satisfacciones. Y este fin de año, sin pretenderlo, se publicaron varios de mis cuentos:

HIC SVNT DRACONES es un proyecto encabezado por Rodolfo JM para Tierra Adentro que reúne 11 ensayos y 11 cuentos sobre la literatura fantástica actual en México. Yo participo con La maniobra de Heimlich, cuento que, hace un par de años, empezó como un guión y que poco a poco se fue transformando en cuento. Lo elegí porque representa otra faceta de lo que suelo escribir: desde su extensión (9 cuartillas) hasta su lenguaje (más sencillo, directo). Y el tema se aleja totalmente del horror cósmico que tanto me gusta.

TAROTEXTOS es un proyecto de Cooperativa Mixcoátl  en Facebook donde se crean cuentos partiendo de las cartas del tarot. A mí me tocó El carro. Inmediatamente recordé el poema Psychopompos de Lovecraft:
Mi carro es el carro de la muerte;
Mis alas son las alas del miedo;
Mi aliento es el aliento del norte;
Mi presa es lo frío y lo muerto.
Así que empecé a escribir el cuento en torno a él (incluyendo elementos de la carta, por supuesto), pero cuando encontré la ilustración de un artista francés llamado Malkav, la imaginación explotó.

Moscas verdes es un cuento que quedó seleccionado para una antología de cyberdrunk (los requisitos era que existiera una atmósfera de cyberpunk y que hubiera una escena de vómito ¿?). Como la editorial no ha mostrado interés en publicar la antología, decidí incluirlo en PENUMBRIA 15 (pág. 41). Como verán, jugué un poco con la estructura, dándole dos opciones al protagonista y al lector.


Emergen, cuento apocalíptico/lovecraftiano que forma parte de la antología Estación central tris (Ficticia), ahora se puede leer en La hoja de arena.

LA IMAGINACIÓN EN MÉXICO es un hermosísimo proyecto de Raquel Castro y Alberto Chimal que pretende reunir a todos los escritores fantásticos del país. Cuando me invitaron a formar parte de él, me pidieron un cuento representativo de mi obra. Elegí Deterioro porque (además de que me gusta mucho) es el cuento que me puso en el "mapa": se publicó en varias revistas electrónicas y en la antología Bella y brutal urbe (Resistencia).



Muchas gracias por leerme.
(El 2014 te seguiré dando lata, pues tengo varios proyectos terminados que sólo están esperando publicación)

domingo, 8 de diciembre de 2013

VOZED

Hace unos días Revista Vozed me entrevistó sobre el futuro del cuento.

Además de mis respuestas, también encontrarán Inmortalidad, minificción inédita de mi autoría.



miércoles, 4 de diciembre de 2013

MIEDO EN CASTELLANO

Hace unos días conseguí la mítica antología Miedo en castellano, el único libro que me faltaba de la bibliografía de Emiliano González. Suceso que creí nunca ocurriría, pues ni el propio Emiliano cuenta con ejemplares. 

Algunos me pidieron que la escaneara. Lamentablemente se estropearía: es una edición de 1973 ( o sea, cuando Emiliano tenía tan solo 18 años… impresionante, ¿no?)

Sin embargo, les comparto la introducción y el índice. Así, si les interesa algún cuento pueden buscarlo en internet (si los encuentran, les agradecería mucho si comparten los enlaces en comentarios).

Maravíllense:




MIEDO EN CASTELLANO

28 relatos de lo macabro y lo fantástico




INTRODUCCIÓN

La literatura de miedo tiene dos modalidades. La primera y quizá más familiar es la fantástica. Vax y Caillois han insistido siempre en lo fantástico como una irrupción violenta de lo sobrenatural en un mundo regido por leyes inmutables. Cuando estas leyes no se ven quebrantadas  sino elevadas al nivel del absurdo, el resultado es puramente macabro. Si todo lo fantástico es en sí mismo macabro (gracias a Poe) lo macabro no es necesariamente fantástico. No hubo fantasmas en Auschwitz. Un incidente grotesco de la casualidad puede ser o no sobrenatural, pero es irónicamente macabro por su misma gratuidad. El cuentista castellano ha sabido distinguir entre uno y otro concepto pero no ha salvado -con sus excepciones- el peligro de la repetición  o, en casos graves, el de inconsciente plagio. Los primeros párrafos de Médium (Baroja) son casi una traducción literal de los mismos en The tell-tale heart (Poe). Un dramático cuento del hispano Clarasó castellaniza El caso del difunto Mister Elvesham de Wells en una manera fría y poco feliz. Quiroga, sin embargo, sabe distinguir influencia de robo y construye así relatos muy originales con argumentos macabros. Borges y Quiroga son probablemente los pilares de la literatura de miedo hispanoamericana. Borges ha inventado un cuento fantástico metafísicamente auténtico. Gente como Bioy, Murena y Cortázar renueva de continuo la temática tradicional. Uno de los motivos favoritos de nuestros cuentistas es el desdoblamiento de personalidad. Los fenómenos parapsíquicos, la telequinesis, la percepción extrasensorial tampoco son rechazados. Pocas veces nos permitimos el juego del horror cósmico y el pánico interestelar. De Poe a Lovecraft preferimos Poe. Es difícil elegir los mejores relatos de una lengua donde lo insólito juega un papel secundario. Nuestra literatura cojeó y sigue cojeando por ese lado porque carecemos de grandes maestros. Me vi obligado, pues, a acudir a las fuentes más inmediatas, es decir, a las colecciones de relatos inverosímiles de aparición más o menos reciente. Tengo cuentos de Cuba y Argentina y España y México. Los dos primeros países son quizá los más prolíficos. María Elena Llana y H. A. Murena rematan sus engendros a través de una brecha repentina en la vida cotidiana. El jugo insólito es bien exprimido. Los autores macabros (y digo esta palabra con timidez por no entrecomillarla) se presentan aquí en sus más cruentos y tristes relatos. Arístides Fernández me gusta mucho. También Abascal, que no necesita de rodeos para mostrarnos todo el horror de su intriga. He preferido cuentos cortos porque la brevedad es el mejor recurso para un rápido susto. De Arrufat, Paz y Elizondo sólo puedo decir que sus mundos tienden más al surrealismo que a lo fantástico. Escriben cuentos alucinantes con un roce de tenebrismo muy particular. También están los españoles. De Azorín y Baroja y Bazán a Ibáñez y Aroca y Gimferrer. No hay mucho para escoger pero lo elegido es bueno. El caso de Aroca es raro. Sus cuentos tienen cierto aire melodramático y hollywoodiano que nos hace pensar en Robert Bloch o Joseph Payne Brennan. El último cuento de ciencia ficción de este libro es el de Piniella. Colocarlo en la sección macabra habría sido una redundancia porque poseía tanto fantasía como sarcasmo. Pero su desarrollo era evidentemente sobrenatural y terminé por incluirlo al final para rematar con una pesadilla mi pequeño muestrario de curiosidades que, si no las mejores en su género, tampoco las peores en su contexto cultural. No nacimos para ser uncanny writers. Quizá el espanto sea la tregua de concesiones que nos recetamos de vez en cuando. Y esas concesiones están aquí.

Emiliano González
Noviembre de 1972




ÍNDICE

I LO ABSURDO Y LO MACABRO

La mano – Arístides Fernández
La Puerta – Salvador Elizondo
Miss Amnesia – Mario Benedetti
Totenbuch – José Emilio Pacheco
No se culpe a nadie – Julio Cortázar
El secreto – Félix Martí-Ibáñez
Las arañas rojas – José Ma. Aroca
El miedo – Ramón del Valle-Inclán
La resucitada – Emilia Pardo Bazán
El almohadón de plumas – Horacio Quiroga
En el insomnio – Virgilio Piñera
Hacia la noche – Héctor Gally
El extraño caso de Baker Street – Isidoro Núñez Miró
El enviado – Jesús Abascal


II LO INSÓLITO Y LO FANTÁSTICO

Nosotras – María Elena Llana
Dos veces el mismo rostro – Vicente Barbieri
El teléfono – Augusto Mario Delfino
Médium – Pío Baroja
Los ojos – Alfonso Hernández Catá
La mariposa y la llama – Azorín
El sombrero de paja – H. A. Murena
El cambio – Antón Arrufat
Posesión – José Cid R.
El ramo azul – Octavio Paz
Una representación furtiva – Pedro Gimferrer
La galera – Manuel Mújica Laínez
Pudo haberme ocurrido – Manuel Peyrou
Las montañas, los barcos y los ríos del cielo – Germán Piniella