Cthulhu despierta. Coge el teléfono, pero la línea está ocupada: es E.T. llamando a casa. ~(;,,;)~
Cthulhu despierta y se convierte en la nueva (y mortal) atracción del museo de Giger. ~(;,,;)~
Cthulhu despierta y acepta con gusto el apodo de Sr. Verde. Nyarlothotep se queja amargamente del suyo: Sr. Rosa. ~(;,,;)~
Cthulhu despierta. Sus alas membranosas te envuelven. No puedes, no quieres escapar. ~(;,,;)~
Cthulhu despierta. Por más que corras no podrás librarte del vaho fétido que impregna tu piel. ~(;,,;)~
Cthulhu despierta y mira el calendario: 15 de marzo: guarda un minuto de silencio. ~(;,,;)~
Cthulhu despierta y encuentra en el buzón miles de cartas provenientes de Providence. ~(;,,;)~
Cthulhu despierta y pinta las paredes de R´lyeh con la leyenda: “Yo soy Providence”. ~(;,,;)~
Cthulhu despierta, Lovecraft también. Con las ofrendas que recolecten durante el día, celebrarán un banquete por la noche. ~(;,,;)~
Cthulhu despierta, Lovecraft también. Recorren en silencio las calles con los rostros desencajados por la desilusión. ~(;,,;)~
Cthulhu despierta. No entiende cómo obtuvo sus diminutas alas hasta que ve La mosca. ~(;,,;)~
Cthulhu despierta y emerge del mar levantando olas. Su furia se extingue cuando tiene que salir de la tina: el agua se enfrió. ~(;,,;)~
Cthulhu despierta en la mesa de disección del doctor Herbert West. ¿Cuándo entenderá que sólo estoy durmiendo?, se pregunta. ~(;,,;)~
Cthulhu despierta sin hambre. Pero al contemplar el grabado de una carnicería, súbitamente le dan ganas de comer carne humana. ~(;,,;)~
Cthulhu despierta, pero su pulposo cuerpo verde pasa inadvertido: es día de San Patricio. ~(;,,;)~
Ilustración de CITYCRUSHER.
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